Uno de los motivos de consulta principales en consulta son las migrañas. La migraña se define técnicamente como un trastorno con manifestaciones episódicas de dolor de cabeza asociado con procesos de hipersensibilidad sensorial (fotofobia, fonofobia, náuseas y vómitos). Con frecuencia, estos dolores de cabeza también se manifiestan con la llamada aura.
Por aura se entienden diferentes alteraciones de la realidad. Éstas pueden ser vértigos, luces centellantes o puntos ciegos temporales. Así como sensaciones erróneas del gusto y del olfato, síntomas de parálisis -paresia-, dificultad del habla -afasia- o percepción de ruidos, sin que exista el correspondiente estímulo externo.
Un ataque de migraña se puede dividir en diferentes fases. Aún así no todos los pacientes sienten todas las fases de la migraña.
Las 4 fases de la migraña
Fase previa -frase prodrómica-. La fase previa a la migraña puede anunciarse a través de síntomas inespecíficos, como un aumento de la sensibilidad, ataques de hambre, hiperactividad e hipersensibilidad a las impresiones sensoriales.
Todos estos síntomas son el primer indicio de que se aproxima un ataque de migraña. Frente a estas molestias aparecen también cansancio, decaimiento y estreñimiento. Aproximadamente, la mitad de los pacientes experimenta la llegada de una migraña aguda con esta fase prodrómica.
Fase de cefalea. Los síntomas típicos de la migraña -penetrante, punzante, latente, espasmódica o pulsátil- van agravándose lentamente durante horas. El dolor suele presentarse en un solo lado. Sin embargo, el lado puede cambiar durante el ataque agudo de migraña. La fase de cefalea suele ir acompañada de náuseas, vómitos y aversión a luces brillantes y ruidos.
En caso de moverse o estresarse, las molestias se acentúan. Debido a estos síntomas acompañantes, los pacientes se sienten mejor en lugares oscuros y tranquilos. La duración de la fase de la cefalea suele ser de entre cuatro y 72 horas, en niños suele ser más breve.
Fase postcefalea. Los síntomas de migraña van disminuyendo y los pacientes manifiestan cansancio y relajación. Por otro lado, a menudo se presentan síntomas contrarios a la fase prodrómica, como, por ejemplo, la falta de apetito.
Fase de recuperación. Puede pasar algún tiempo hasta que el paciente se recupera completamente del ataque de migraña.
Comprensión de la migraña
A día de hoy aún no se han aclarado definitivamente las causas exactas de la migraña. Sin embargo, se están dando en los últimos años grandes avances en la descripción de la fenomenología y de la biología de la migraña.
Ahora hay una comprensión más integral sobre la neurobiología del aura, siendo causado por un fenómeno neurofisiológico llamado depresión cortical propagada (CSD) y del dolor, causado por la activación de las fibras nervio trigémino que inervan la duramadre y los vasos craneales (sistema trigeminovascular).
De hecho la variación de presión intracraneal producida por una disminución o aumento brusco del flujo sanguíneo se considera un factor determinante. Aún así, queda mucho por descubrir. Cuáles son los desencadenantes de la migraña y los diversos mecanismos de acción que nos llevan a ella serían algunos ejemplos.
En Regenera siempre basamos nuestros tratamientos y consejos en evidencias científicas.
El papel de la histamina
Dentro de lo que sabemos, una amina vasoactiva llamada histamina parece ser uno de los factores asociados al padecimiento de las migrañas. Es bien sabido que la histamina puede causar tanto la recurrencia de un dolor de cabeza provocado por la eliminación de un fármaco, exagerar un dolor de cabeza unilateral preexistente o desencadenar o alargar un dolor de cabeza.
Para conocer de qué manera y dónde nos está afectando la histamina existen varios datos relevantes:
- Los 2 tipos de histamina. La histamina esencialmente no penetra la barrera hematoencefálica. Por lo tanto diferenciaremos los efectos producidos por la liberación neuronal de histamina y la histamina periférica.
- Efectos de la histamina periférica. En la periferia se asocia a la liberación de ácido en el estómago, diarrea y funciones inmunitarias.
- Neuronas que liberan histamina. Existe al menos una población de 64 mil neuronas con capacidad de liberar histamina situacadas principalemente en el hipotálamo basal posterior.
- Aumento del estrés. En general, la liberación de histamina se relaciona a un aumento del estrés. De hecho el sistema histaminérgico representa el sistema de viglia o de despertarnos más importante. Durante la noche la liberación de GABA ocurrida durante el sueño inhibe directamente las neuronas histaminérgicas.
- Patrones biorrítmicos de la migraña. La migraña sigue patrones biorritmicos donde primera hora de la mañana es una de las ventanas de susceptibilidad más importante para sufrir migrañas.
- La luz y la migraña. Esta regulación de biorritmos es orquestada por el nucleo supraquiasmatico que reacciona a los niveles de luz. Sí, eso es, por eso algunas migrañas mejoran a oscuras).
- Inflamación meníngea. Un tipo de célula inmunitaria, los mastocitos, se pueden encontrar en la duramadre en estrecha proximidad a las fibras aferentes nociceptivas del trigémino. A través de una serie de estudios realizados por Moskowitz et al, algunos tipos de migraña se deben a una inflamación meníngea local donde la histamina pueden desempeñar un papel importante en este proceso.
- Metabolización de la histamina. En el cerebro, la histamina se metaboliza casi exclusivamente por metilación. En la primera parte la lleva a cabo la enzima N-metiltransferasa (HMT) producir N-metilhistamina.
Filosofía, experiencia clínica y plausabilidad biológica
Con estos conocimientos, últimamente -y solo como una ayuda clínica- suelo categorizar las migrañas en 3 tipologías:
- Migrañas centrales
- Migrañas trigeminales
- Migrañas periféricas
He pensado que, antes de describiros las características de los tres grupos, os voy a dejar una semana para que cada uno se haga sus propias tablas de síntomas pues será mucho más divertido. ¿Os apuntáis al juego? En una semana os presento características de cada tipo de migraña y posible tratamiento.
Autor: Néstor Sánchez
Co-Director de Regenera
Máster en Psiconeuroinmunología Clínica
Máster en Biología Humana